El pasado 24 de
octubre se festejó el Día de la Biblioteca, una celebración
surgida por iniciativa de la Asociación
Española del Libro Infantil y Juvenil en 1997, tomando como
referencia el incendio de la Biblioteca de Sarajevo durante la guerra
en la ex-Yugoslavia en agosto de 1992.
Dejado atrás este
día, para todas y todos los amantes de las bibliotecas, enlazo en
esta entrada un par de documentos enormemente reveladores del valor
de aquellas y su función:
- “Cuando la
memoria se convierte en cenizas…” de Edgardo Civallero, realiza
un recorrido sobre la suerte pareja de la Humanidad y de las
bibliotecas en los graves conflictos del siglo XIX, sobre las muertes
que sufrió la primera y el memoricidio causado por la destrucción
de las segundas.
- Anterior a la
celebración de este día, el Manifiesto de la IFLA (Federación
Internacional de Asociaciones de Bibliotecarios y Bibliotecas)
/ UNESCO sobre la biblioteca pública de 1994 constituye un referente
extraordinario para entender la significación de las bibliotecas en
la educación, la cultura y la información y para resumir las
funciones de las bibliotecas en nuestra sociedad y los principios de
su gestión por el
bien de la comunidad.
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